jueves, 12 de septiembre de 2013

Merecer la suerte

La suerte es caprichosa; todo va bien hasta que deja de ir...


Como le pasó a Carlos Sainz y Luis Rodríguez Moya en 1998. A 500 metros de terminar el rally de Inglaterra y de ganar su tercer mundial, el coche, con el que habían circulado miles de horas y de kilómetros, dijo que no... y perdieron. Verdaderamente mala suerte.

Después hay casos donde la suerte se busca, y se encuentra sufriendo. Hace menos de 3 días mi admirado Rafa Nadal sufrió en el tercer set del Open de Estados Unidos; con 4-4 en el set, y 1-1 en el marcador, frente a Djokovic levantó un 0-40 con su saque. Fue la clave. A partir de ahí gano el set, y en el siguiente barrió a su adversario. Buscó la suerte y la encontró...


La suerte existe. Golpes de suerte y de mala suerte todos tenemos. Hay gente que se empeña en encontrarla, y... no todos lo consiguen. Y hay personas que la merecen, pero que no la alcanzan... ¿Porqué?

Porque no aprovecharon su oportunidad, o porque no la tuvieron, o porque no la vieron... la suerte, las chances, las salidas pasan, todos buscamos trenes donde subirnos, y no siempre los tenemos, o los encontramos.

Uno de los grandes jugadores de ajedrez de la historia, y del que sus rivales decían que tenía suerte, era Miguel Tal, del que ya he hablado en este blog.


Sus contrincantes, tras perder con él trepidantes y alocadas partidas, hablaban de su gran fortuna... Decían que los engatusaba, que hacía magia... de ahí le vino su apodo "el mago de Riga". Él, respecto a la suerte, dijo:

"Si esperas que la suerte aparezca, la vida se vuelve muy aburrida"

Y creo que está en lo cierto. En la escena final de la película "Salvar al soldado Ryan", al soldado Ryan, tras las peripecias y aventuras que suceden, solo le dicen:

"Hágase usted digno de esto (la suerte de sobrevivir), merézcalo".



Veo a personas buenas a diario, gente a la que (a mi también), le vendría bien algo de suerte. Cada uno con sus anhelos y necesidades. Necesitan suerte... la merecen. Lo veo. Lo sé.

Lo que no se es si la buscan, y si el camino, como le pasaba a Miguel Tal, se les hace aburrido o se lo pasan bien. Yo prefiero lo segundo.

Ya llegará esa dichosa suerte.

2 comentarios:

  1. La cualidad más notable de la suerte es que puede ser buena o mala.

    saludos
    jose maria

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  2. Yo creo que lo m.as importante del camino, no es el destino, sino aprovechar el camino hacia el mismo, por si acaso no llegas a la meta.

    Y si no puedes hacer le que quieres, una buena solución es querer lo que haces, no sea cosa que en el caso de que te llegue la suerte, te des cuenta tarde de que la misma no te compensa de lo que no has sabido aprovechar esperándola.

    saludos

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